Las prótesis mamarias de la marca francesa PIP, compuestas por una silicona no autorizada en la UE, no son tóxicas ni cancerígenas, según un informe elaborado por el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS, siglas en inglés).
El documento afirma que el gel de silicona de estas prótesis, que habitualmente se utiliza en la fabricación de colchones y que no cuenta con autorización de la Unión Europea (UE) para su uso en implantes mamarios, puede causar irritación pero "no supone una amenaza a largo plazo para la salud humana".
El texto, elaborado por un grupo de expertos dirigidos por el director médico del NHS, Bruce Keogh, pretende zanjar el escándalo de los implantes de pecho de Poly Implants Prosthéses (PIP), retirados del mercado en 2010 tras ser relacionados con casos de cáncer en Francia, reseñó Efe.
La investigación concluyó que no existe ninguna relación entre las prótesis PIP y el cáncer y que las mujeres que las tienen, alrededor de 47.000 en el Reino Unido, han sufrido una "preocupación increíble".