El Chelsea logró hacerse con el boleto a la final de la Liga de Campeones al empatar a dos tantos con el Barcelona en el Camp Nou, en un partido emotivo y cargado de emociones de principio a fin. Los “Blues” supieron contener al equipo de Josep Guardiola gracias a una efectiva defensa que le impidió al argentino Lionel Messi y compañía llegar con facilidad al área rival.
Los culé comenzaron presionando desde el primer minuto de juego, generando dos buenas ocasiones en los pies del chileno Alexis Sánchez y del argentino Lionel Messi, que no encontraron el fondo de las redes. Messi nuevamente al minuto 19 chocó con la pared defensiva del Chelsea tras una buena pared con Cesc Fabregas.
A medida que pasaban los minutos, el Chelsea se cerraba más y más en defensa, colocando hasta 9 hombres en el borde del área para evitar el ingreso de los atacantes culés. Sin embargo, al minuto 35, la defensa londinense falló y Daniel Alves, que entró minutos antes por Gerard Piqué, que salió lastimado en un espectacular choque que involucró a Víctor Valdés y Didier Drogba, habilitó a Cuenca para que éste soltara de pierna zurda un busca pierna que encontró Sergio Busquets en el punto penal para convertir el primer tanto del conjunto azulgrana.
El panorama se oscurecería aún más para el Chelsea al minuto 36 cuando el defensa John Terry, perdió la cabeza, y agredió sin balón, al chileno Sánchez para ganarse la tarjeta roja. Con 10, el conjunto de Roberto Di Matteo se echó totalmente atrás a esperar al Barcelona, que al minuto 44 amplió la ventaja gracias a un tanto de Andrés Iniesta con asistencia de Messi.